MIS DÍAS EN RISHIKESH

Agotada después de los ya pasados tres meses de viaje en los que no me he dado tregua alguna para el descanso, Rishikesh ha sido como un soplo de aire fresco.

Decidí alargar la estancia en Rishikesh sacrificando otro de mis destinos.

Durante éstos días he aprovechado para descansar, pasear por la ciudad, chapotear en el Ganges, relajarme en sus playas fluviales, hacer cursos de meditación y de yoga y visitar el ashram de los Beatles.

jardines del Ved Niketan

La primera noche la pasé en Lakshman Jhula en un guesthouse (Aggarwal House, 150rp habitación doble con baño). A la mañana siguiente me mudé a la zona de Ram Jhula al conocido ashram Ved Niketan. A mi llegada sólamente había disponible una pequeña habitación  con ventilador, sin baño ni enchufes y con un colchón del grosor de 10 cm... pero estoy muy tranquila y agusto. Por la estancia superior a una semana las clases diarias de yoga y meditación son gratis. Además el entorno es precioso, situado frente al río Ganges puedo disfrutar de las amplias y cuidadas zonas verdes. Sólamente pago 100rp por noche que equivale a 1,60€.

El principio era reacia pero las clases de meditación me están gustando mucho. Impartidas por el anciano Sant Shree Hari ayudan a relajarte en posturas fáciles de yoga haciendo ejercicios de respiración e intentando canturrear Mantras en Dios sabe que lengua...

paseando por los pasillos del ashram

Por el contrario definitivamente el yoga que imparten en el ashram no es lo mío... las posiciones con la cabeza boca abajo me resultan muy incómodas y decidí abandonar las clases.

Muy cerquita del Ved Niketan se encuentra el abandonado Maharishi Mahesh Yogi Asrham dónde los Beatles pasaron una temporada componiendo canciones. Lo visité guiada de un vecino de otra habitación. En las proximidades hay un parque con un montón de divertidos monos a los que dimos de comer. Para visitar el asrham hay que pagar una "entrada" al vigilante de seguridad pero el muro está medio caído en alguna parte y no fue difícil saltar por allí. El espacio del ashram es enorme, todavía no entiendo por qué lo cerraron y abandonaron, me parece una pena. Situado en plena montaña y medio derruido ahora los arbustos crecen a sus anchas y se aprecian excrementos de elefante por todo el recinto aunque yo no ví ninguno. Las habitaciones independientes, en forma ovalada, se reparten por todo el conjunto y hay un pabellón dónde la gente ha invertido bastante tiempo creando bonitos dibujos.

Durante éstos días he conocido a muchísima gente con la que he mantenido conversaciones profundas sobre la vida y la filosofía... Rishikesh es el lugar idóneo para hablar de éstas cosas, la espiritualidad se respira en el ambiente.

 

Pasear por sus calles, beber los deliciosos zumos de caña de azúcar, jugar partidas a las cartas con mis compis del ashram, disfrutar de las playas en buena compañía.... meditar... son algunas actividades que se pueden realizar en Rishikes.h

También aproveché para llevarme una nueva titulación... pero de eso os hablaré más adelante...

calle principal de Ram Jhula

Además una de las chicas que he conocido, Fernanda (México) me enseñó con mucha paciencia a hacer pulseras de macramé y ya luzco tobillera nueva!!!

  

Rishikesh está siendo uno de mis favoritos... uno de esos sitios de los que es difícil marcharse... uno de esos a los que siempre querré volver!!!