CALCUTA, PRIMERAS HUELLAS EN INDIA

Los primeros días en Calcuta han sido un desastre.

Conseguí una sucia habitación en un hostal de mala muerte (aunque tengo la extraña certeza de que no será ni mucho menos la peor que me encuentre en India).

1ª misión: sacar dinero.

Bajo el insoportable calor (unos 40º) recorrí una calle larguísima hasta llegar a un cajero. En el camino me crucé con multitud de gente, infinidad de puestos de comida callejera de dudosa higiene, pobreza y miseria, gente durmiendo en las aceras, gente aseándose en grifos de la calle, basura y suciedad por todos lados, cerdos bañándose en los charcos, cuervos muchos cuervos acechando... ratas, callejones de suburbios, carros que llevan a gente y que son arrastrados por hombres, gente trajeada con sus maletines caminando al lado de los que duermen en las aceras y de chabolas construidas con plásticos.... Llegué al ATM. Mis tarjetas no funcionan aquí. Vuelvo a caminar hacia el hostal y pregunto a otros viajeros que me encuentro en el camino. Consigo llegar a otro ATM, mis tarjetas tampoco funcionan aquí. No tengo dinero. No se puede pagar con tarjeta en el hostal. No hay wifi en ningún lado...  Me inundó la noche.

Caminaba intentando encontrar algún restaurante de lujo dónde pudiese pagar con tarjeta con mi inminente preocupación cuando un hombre hindú y de aspecto pobre dijo a mi paso: "Don´t worry, be happy". Sonreí, me recordó que estaba en la India.

Al día siguiente después de mandar un mail a mi banco en España desde una tienda de vodafone dónde no recargan más que a tarjetas indias vodafone (ésto no lo había oído nunca...) pude sacar dinero, por fín!!!

con Asif

Me acerqué caminando a la estación de venta de tickets de tren para extranjeros. En mi camino conocí a Asif, un joven hindú, que me acompañó hasta la estación. Pensé que quería mi dinero pero me aseguró que no. Conseguí billete de tren para el día siguiente en la clase Slipper (cama). India es muy barata, por 240 rupias (3,50€) llegaría hasta Siliguri en unas 12 horas.

Por la mañana recogía mi mochila cuando me llamaron a la puerta, Asif me esperaba en recepción. Asif no quería mi dinero, era verdad... quería sexo!! Más directo no pudo ser y, pese a mi negativa, me acompañó a visitar el impresionante "Victoria Memorial", una obra muy parecida al Taj Mahal que visitaré en unas semanas. La increible cúpula construída en marmol blanco contrasta perfectamente con los verdes jardines que la rodean en su exterior, espero que os gusten las fotos. Un sitio precioso.

Por la tarde me dirigí hasta la caótica estación de tren en taxi, no fue fácil. Ningún taxi quería acercarme hasta allí, aún no se por qué!! Con el calor abrasador, cargada con las mochilas, agobiada entre tanta gente y tanto tráfico, un hombre debió verme agotada y me ayudó a conseguir un taxi.

La estación de tren tiene una estampa parecida a lo que, difícilmente, voy intentando acostumbrarme a ver, miseria y pobreza, desgracia. Gente que duerme en el suelo, niños que vienen a pedirme dinero, personas con extremidades amputadas. Tiene que ser duro nacer en la India, demasiada desgracia.

Han sido unos días difíciles, pero lo más difícil de todo es contemplar toda ésta miseria. Volver la cara cuándo un niño viene a pedirme dinero y negar con la cabeza, ésto sí es difícil. 

Ver a la gente durmiendo en la calle medio desnuda, ésto sí es difícil. 

Tanta desgracia, gente con malformaciones, con extremidades amputadas, desamparada. India es difícil. Viajar por India va a ser duro.

 

Dentro de toda la pobreza y multitud que me rodea, extrañamente es una ciudad muy segura. En ningún momento me he sentido mal, los indios son gente muy amable que siempre me han ayudado cuando he necesitado preguntar sobre algún lugar y al día siguiente de estar en Calcuta ya tenía 3 o 4 conocidos que me saludan en castellano cuándo me ven y me preguntan dónde voy y qué tal estoy.

Próxima parada Siliguri-Darjeeling, la cuna del té!!!