MARAVILLAS DEL MUNDO, "BAHÍA DE HALONG"

Bahía de Halong

 

 

Contraté la excursión a la Bahía de Halong en un hotel de la avenida principal de la Isla de Cat Ba. Por 20$ pasaría el día navegando en barco y kayak, visitando 2 cuevas y jugando con los monos que habitan en uno de los islotes. La comida "mariscada" también está incluida!! (la bebida, carísima, no está incluida...)

A las 8 de la mañana una minivan nos acerca al puerto y montamos en el barco.

La travesía fue muy tranquila, navegamos entre los grandes islotes que emergen del mar. Está plagado de islotes, hay cientos!! Algunos con formas muy curiosas, otros un poco más grandes con playa y resort. Por toda la travesía pudimos ver "pueblos flotantes" de pescadores.

 

Casitas flotantes de pescadores

Navegamos en silencio durante 3 horas bordeando decenas de islotes. Lo que más puedo destacar de ésta excursión es el silencio y la paz que se disfruta en el barco, es muy relajante.

Primera parada, primera cueva. Fue espectacular, muy bonita pero demasiada preparada para el turismo... Lucecitas de colores iluminando la cueva, largos caminos asfaltados, escaleras, vallas de seguridad para que no se salga nadie del caminito... y muchísima gente!! A la salida había vendedoras en pequeñas barquitas, sin duda vendían pescado fresco fresco!!

Segunda parada, segunda cueva. Ésta me gustó muchísimo más que la primera!! No había nadie en la isla más que nosotros. La cueva era mucho más rústica dónde tuvimos incluso que escalar por las piedras!! Fuera de ella un camino se bifurca, por un lado a un lago que se encuentra en el interior de la isla, por el otro se asciende hasta la cima. Recorrí los 2!! Me pegué una buena paliza subiendo y bajando pero mereció la pena por las vistas, aquí os dejo muestra de ello.

Espectacular lago en medio del islote

Comida a bordo del barco, el guía del barco preparó abundante comida (pero de marisco nada!!!!) rollitos de primavera, arroz, tofu vietnamita, patatas cocidas y calabaza... ñññ....

Tercera parada y con la comida casi en la boca, kayak. El barco paró en una zona tranquila con varios islotes rodeandonos. El guía nos dijo que podíamos entrar a una pequeña cueva, genial!! El grupo que formamos en el barco no podía ser más aburrido así que hice el kayak yo sóla en uno individual. El grupo se dispersó y yo me adentré en la cueva con mucha facilidad... y es que la corriente del agua me arrastraba hacia dentro rápidamente!! Grité e intenté dar la vuelta al kayak, me costó muchísimo!! La corriente me arrastró hasta un punto en el que ya casi no veía nada y me puse a remar como una bestia!! En éstos momentos sacas una fuerza que no sabes dónde se esconde en tu vida normal... El cansancio crecía al mismo tiempo que mi cabreo!! Conseguí salir de la cueva agobiadísima y le dije al guía que cómo se le ocurría decir que podíamos entrar allí, que estaba loco!!! Un poco más tranquila después de recobrar el aliento, volví a remar, ésta vez por zonas menos peligrosas.

El mono cervecero

Cuarta y última parada, ísla de los monos. Paramos en una playa muy bonita dónde recogí algunos tesoritos. Comenzamos a buscar los monos... Subimos por un caminito (trepando en algunos puntos) hasta la cima de la montaña desde dónde había vistas espectaculares. Bajamos casi a rastras por el mismo camino (llegamos a pensar que los monos éramos nosotros). En la playa por fín vimos los monos!! Uno muy simpático se acercó hasta una lata de cerveza y comenzó a beber!! La lata estaba llena y se puso las botas!! La situación fue graciosísima. Se ve que el alcohol no le sienta demasiado bien al primate que empezó a amenazarnos y a asustarnos, sacando una foto a un colega suyo me pellizcó el tobillo el muy ... !!! Fue muy divertido.

Iniciamos la vuelta por el mismo camino.

Ha sido un día muy especial, pero no tanto cómo siempre imaginé...

Lo cierto es que me siento un poco decepcionada, pensé que iba a ser más espectacular de lo que ha sido en realidad. Imaginaba los islotes más altos por lo que siempre había visto en las fotos... no sé, diferente. Estos islotes (obviamente no tanta cantidad) los vi en Krabi (Tailandia) semanas atrás y con un agua azul turquesa que hacía daño mirarla. Me alegro de no haber contratado la excursión desde Hanoi (como pensé en un principio) y así poder disfrutar también de la ísla de Cat Ba, dónde hay varios puntos de interés que os contaré más adelante... Hasta entonces, nos vemos!!